Creo que estoy amaneciendo.
Creo que estoy creciendo en ola,
agigantándome hasta volcarme
serena y fresca,
enérgica y cálida,
profunda,
viva,
tormentosa y amplia en el cauce.

No me preguntes adónde iré,
no lo sé todavía;
pero quiero vencer el silencio,
quiero crecer en el tiempo
y ver cómo construyo mi cuerpo,
cómo descubro el letargo
y lo transformo de a poco,
muy lento,
en vida palpitante,
sin misterios.

Te espero para entonces.
No sé cuándo pero nos encontraremos.
Será un día como otros,
y de pronto nos veremos
sin plazos, sin silencios.
Y sin preguntarnos nada
sabremos si el camino es juntos,
si la vida es el mañana,
si no nos mintieron los sueños.

Será un amanecer.
Lo siento en el aire
y más que eso,
me está creciendo en el pecho.